Cuando todos han regresado hemos comenzado a navegar para volver al puerto de Halong y durante el trayecto nos han servido un desayuno completo (“brunch”) que será nuestra comida de hoy porque se supone que llegamos a Hanoi sobre las 16:00.
Sobre las 11:30 llegamos a puerto y nos despedimos de la tripulación del Valentine y del resto de pasajeros y sobre las 12:00 nos ha recogido el minibus de Handspan para volver a Hanoi. El viaje ha sido de casi 4 horas porque no paraba de llover y había muchísimo tráfico (hay 165 km entre Halong y Hanoi).
Los desplazamientos en Vietnam por carretera son muy lentos porque aunque la distancia a recorrer sea corta, las carreteras son muy malas y los conductores no respetan los carriles. Invaden el lado contrario sin ningún problema y pueden estar a la vez adelantando en ambos carriles. Incluso en la autovía invaden el sentido contrario para adelantar si es preciso o hacen un cambio de sentido sin ningún reparo. Todo esto hace que la velocidad máxima que alcanzan sea de 70-80 km/h pero en la mayor parte del trayecto circulan a 50-60 km/h y gracias a esto no tienen tantos accidentes como se esperaría.
Llegamos al hotel Serenade de Hanoi sobre las 4 de la tarde, nos tomamos un café para despejarnos e invertimos el resto de la tarde en pasear por el barrio antiguo y el barrio francés y realizar algunas compras.
Para cenar hemos ido al restaurante Tonkin (recomendado en la Lonely Planet) y aunque la comida estaba buena no nos ha gustado el ambiente (estaba lleno de tours de turistas japoneses) y ha resultado muy caro.
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